Vamos a hablar ahora de la fecha del Nacimiento del Señor. La pregunta es: ¿Por qué podemos pensar que la fecha del Nacimiento de Jesus es el 1 a.C o después de Cristo y el no el 4 a.C como dicen la mayoría de los historiadores? Para explicarlo nos referiremos a los censos de población que los gobernantes realizaron alrededor del momento del nacimiento del Señor, y también a las monedas que muestran en que años fueron los distintos reinados."En aquella época apareció un decreto del emperador Augusto, ordenando que se realizara un censo en todo el mundo. Este primer censo tuvo lugar cuando Quirino gobernaba la Siria". Este censo citado en Lc. 2,1 es finalmente otro dato importante para establecer la fecha del nacimiento de Jesús. Habitualmente se piensa en el censo que se hizo en el año 8 a.C., pero hay quien sostiene que este se aplicó solamente a los ciudadanos romanos. Orosio, un historiador del siglo quinto afirma que por sus 25 años de reinado –es decir, en torno al 2 a.C- el emperador Augusto ordenó un censo –que se inició el año anterior- que debía hacerse con juramento de fidelidad al imperio romano, y que Jesús fue inscrito en las listas de este censo poco después de nacer. Esta tesis concuerda con la de Pratt en la que afirma que el nacimiento de Jesús fue en el siglo 1 a.C.
Otra de las principales objeciones a la datación de la muerte de Herodes en el 1 a.C en vez del 4 a.C. está basada en el reinado de sus hijos Arquelao y Filipos, que fueron sus herederos. Hay monedas del 1 d.C. donde se señala que estos hijos están ya en el año 5 de su reinado. Para poder sostener que la muerte de Herodes ha tenido lugar en el 1 a.C ó d.C, habría que afirmar que sus sucesores retrocedieron ficticiamente el inicio de su gobierno.
Esto era una práctica común en esa época. Para dar mayor prestigio a un reinado, se consideraba que el nuevo monarca había sido asociado al gobierno de su padre en los últimos años de su mandato. Cuando el nuevo monarca comenzaba a reinar llevaba pues, según estos cálculos, varios años reinando. La confirmación de esta hipótesis vendría por el hecho de que nunca se encontraron monedas antes del año quinto de los reinados de Arquelao y Filipo. Para este periodo histórico y esta zona geográfica, por la cantidad de monedas conservadas, no parece verosimil que de varias emisiones seguidas de monedas -se emitian cada año- no se hayan descubierto al menos una decena de ejemplares, ni siquiera uno solo, como de hecho se han encontrado de todos los demás años. El año 1 a.C ó d.C sería, por tanto, el primer año del reinado real de Arquelao y Filipo después de la muerte de su padre. Pero de derecho se consideraba que estos dos reinados se habían iniciado en el año 4 a.C, en los últimos años de la vida de Herodes, y así se registró en los anales.
Quedan todavía algunos nudos que desatar y la búsqueda historiográfica no ha concluido definitivamente su función de indagar en la cronología de Jesús. La falta de referencias cronológicas universales, algunas discrepancias notables entre las diversas fuentes, y una falta manifiesta de datos del periodo 6 a.C. - 4 d.C., hacen complejo el trabajo de interpretación. Probablemente deberemos estar atentos al descubrimiento de nuevas fuentes –como por ejemplo lápidas o inscripciones- que nos ayuden a resolver la cuestión.
Esto era una práctica común en esa época. Para dar mayor prestigio a un reinado, se consideraba que el nuevo monarca había sido asociado al gobierno de su padre en los últimos años de su mandato. Cuando el nuevo monarca comenzaba a reinar llevaba pues, según estos cálculos, varios años reinando. La confirmación de esta hipótesis vendría por el hecho de que nunca se encontraron monedas antes del año quinto de los reinados de Arquelao y Filipo. Para este periodo histórico y esta zona geográfica, por la cantidad de monedas conservadas, no parece verosimil que de varias emisiones seguidas de monedas -se emitian cada año- no se hayan descubierto al menos una decena de ejemplares, ni siquiera uno solo, como de hecho se han encontrado de todos los demás años. El año 1 a.C ó d.C sería, por tanto, el primer año del reinado real de Arquelao y Filipo después de la muerte de su padre. Pero de derecho se consideraba que estos dos reinados se habían iniciado en el año 4 a.C, en los últimos años de la vida de Herodes, y así se registró en los anales.Quedan todavía algunos nudos que desatar y la búsqueda historiográfica no ha concluido definitivamente su función de indagar en la cronología de Jesús. La falta de referencias cronológicas universales, algunas discrepancias notables entre las diversas fuentes, y una falta manifiesta de datos del periodo 6 a.C. - 4 d.C., hacen complejo el trabajo de interpretación. Probablemente deberemos estar atentos al descubrimiento de nuevas fuentes –como por ejemplo lápidas o inscripciones- que nos ayuden a resolver la cuestión.
"Stella di Betlemme", artículo publicado en la revista "Scienza e Fede", por Michele Crudele.






"Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque hemos visto su estrella en el oriente, y venimos a adorarle. Oyendo esto, el rey Herodes se turbó, y toda Jerusalén con él. Y convocados todos los principales sacerdotes, y los escribas del pueblo, les preguntó dónde había de nacer el Cristo. Ellos le dijeron: En Belén de Judea; porque así está escrito por el profeta: Y tú, Belén, de la tierra de Judá,No eres la más pequeña entre los príncipes de Judá;Porque de ti saldrá un guiador,Que apacentará a mi pueblo Israel. Entonces Herodes, llamando en secreto a los magos, indagó de ellos diligentemente el tiempo de la aparición de la estrella; y enviándolos a Belén, dijo: Id allá y averiguad con diligencia acerca del niño; y cuando le halléis, hacédmelo saber, para que yo también vaya y le adore. Ellos, habiendo oído al rey, se fueron; y he aquí la estrella que habían visto en el oriente iba delante de ellos, hasta que llegando, se detuvo sobre donde estaba el niño. Y al ver la estrella, se regocijaron con muy grande gozo. Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra. Pero siendo avisados por revelación en sueños que no volviesen a Herodes, regresaron a su tierra por otro camino" (Mt 2, 1-12). 
