miércoles, 30 de diciembre de 2015

Felicitación navideña entre las iglesias cristianas de Tierra Santa


En estos días que siguen a la Navidad, entre el 26 y el 27 de diciembre, como ya es tradicional, los representantes de las distintas Iglesias cristianas de Jerusalén, sobre todo aquellas que colaboran según las normas del Status Quo, se han reunido para felicitarse mutua y fraternalmente con motivo de las fiestas navideñas en un clima sincero de simpatía y apertura.

Los primeros en ser recibidos en la Curia custodial, en el convento de San Salvador, durante la mañana del 26 de diciembre, han sido los religiosos griegos ortodoxos a los que han seguido, en la jornada del 27 de diciembre, los armenios, etíopes, coptos y siríacos. Sin embargo, han sido los franciscanos quienes, a media mañana del día 27 de diciembre, se han acercado para visitar a la comunidad melquita para el tradicional intercambio de felicitaciones navideñas.


Los huéspedes han sido recibidos en el Diván del convento por el custodio, fray Pierbattista Pizzaballa, por el vicario custodial, fray Artemio Vítores, y por el secretario, fray Silvio de la Fuente, junto a gran parte de la comunidad de frailes. Estaba también presente un grupo de jóvenes frailes, estudiantes del Studium Biblicum Franciscanum, que ha alegrado las visitas con algunas melodías interpretadas con guitarras e instrumentos de percusión.

Estos encuentros se rigen por un ceremonial ya consolidado que se repite con regularidad en las distintas visitas: en primer lugar, el jefe de la delegación acogida dirige su saludo al custodio y a toda la comunidad de frailes, da las gracias por la invitación recibida y expresa su felicitación por la Navidad, deseando lo mejor para el futuro y subrayando los vínculos de amistad que les unen con los franciscanos; el custodio, a su vez, responde de igual modo y con contenidos similares. A continuación se sirven licores y dulces navideños mientras que las conversaciones entre los presentes adquieren un tono más informal, hasta que la visita llega a su término y los huéspedes se retiran con un cordial saludo. Tras la Epifanía, cuando las Iglesias orientales celebren la Navidad, será el custodio y la comunidad franciscana la que se ponga en movimiento para cumplimentar con sus felicitaciones.

Finalmente, a última hora de la tarde del 27 de diciembre, se ha celebrado el tradicional encuentro en la Custodia para el intercambio de felicitaciones, de una manera mucho menos formal respecto del resto de los encuentros, con las demás comunidades cristianas, con el Patriarca latino de Jerusalén, y posteriormente con el Nuncio Apostólico, con los que el custodio se ha detenido brevemente a hablar sobre el desarrollo de las celebraciones navideñas de los últimos días que se han realizado, como de costumbre, en medio de un complejo aparato litúrgico, organizativo y de seguridad.

Caterina Foppa Pedretti

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Navidad en Belén. Todo empezó aquí

«Toda la historia empezó aquí, en Belén, con el nacimiento de Jesús». Un joven peregrino está en éxtasis: «¡Es grandioso!». En este 24 de diciembre, en la plaza del Pesebre, una variopinta muchedumbre se ha reunido delante de la basílica de la Natividad. Hay grupos de peregrinos, familias de Belén, niños disfrazados de Papá Noel. Los velos de algunas mujeres musulmanas se mezclan con los de las religiosas y con los gorros rojos con pompones blancos. Peregrinos de todo el mundo intentan abrirse paso para ver de cerca el cortejo de los exploradores. En este comienzo de tarde soleado, al patriarca de Jerusalén, Su Beatitud Mons. Fuad Twal, se le espera para que realice su ingreso solemne en la basílica de la Natividad. Belén está en fiesta.

Los Scouts desfilan por la ciudad, haciendo resonar sus tambores y trompetas, en un desfile alegre. Personas de todas las confesiones y de todas las edades hacen ondear las banderas palestinas. «Somos sobre todo de Belén, Beit Sahur, Beit Yala y Ramala. «¡Hemos estado ensayando desde hace algunos meses para estar hoy preparados!», explica un joven Scout siríaco ortodoxo.

El patriarca, que llega de Jerusalén, se encuentra con las autoridades civiles de la ciudad. Todos avanzan hacia la basílica, escoltados por los franciscanos. El guardián de la fraternidad, le acoge y, tras el tradicional saludo a las demás confesiones cristianas en la nave de la basílica, le acompaña, al canto del Te Deum, para rezar las primeras vísperas en la iglesia de Santa Catalina. En este día especial, Su Beatitud Mons. Fuad Twal, los seminaristas del Patriarcado latino y algunos peregrinos se unen a la procesión cotidiana de los franciscanos.

Fuera se va haciendo de noche y las luces iluminan la plaza. Las actuaciones se suceden en un escenario montado para la ocasión. En la basílica están ultimando los preparativos. Los frailes sacristanes y los ceremonieros están muy ocupados. Gracias a este trabajo entre bastidores, todo se desarrollará de la mejor manera ante los objetivos de las cámaras de televisión que retransmitirán la ceremonia al mundo entero.

Al mismo tiempo, en el Campo de los Pastores, grupos de peregrinos se alternan en las distintas grutas, capillas y tiendas para celebrar misas. Son católicos y protestantes procedentes de Indonesia, China, Hispanoamérica o Europa. En una sacristía, un franciscano se dispone velozmente a preparar la próxima misa. «Durante el año aquí solo hay un franciscano, pero por Navidad hemos venido seis, sobre todo seminaristas, para ayudar». Cada uno de ocupa de tres o cuatro puestos, y debe gestionar la organización de una decena de misas que se celebran al mismo tiempo. Sin embargo, la afluencia de peregrinos ha disminuido: «Este año se han previsto 70 grupos, frente a los 140 del año pasado, a causa de la difícil situación del país. Todo se vive con simplicidad y la atmósfera es relajada. Algunos de los grupos no han llegado y otros lo han hecho con retraso, debido al cambio horario». Pero el espíritu de Navidad no falta y añade sonriendo: «Las personas no se quejan y todos se felicitan la Navidad».

A las 23.15 comienza en la iglesia de Santa Catalina el oficio de lecturas, seguido de la Misa del Gallo, presidida por el patriarca y que congrega a 1.700 fieles. Están presentes los cónsules generales de las cuatro naciones latinas –Bélgica, España, Francia e Italia- y el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbás. En este día en que se celebra el nacimiento del Niño Jesús como salvador, Mons. Fuad Twal ha invitado a rezar por la paz en Tierra Santa. En la gruta, en el altar del Pesebre, abuna Nirwán, el párroco, celebra con sus vicarios la misa de Navidad en árabe. La misa se celebra de modo especial por la paz en Oriente Medio, y en particular por Siria e Irak, donde los cristianos sufren mayormente.

Al concluir la celebración, y al canto del Gloria in excelsis Deo, el patriarca lleva en procesión la imagen del Niño Jesús hasta el pesebre, mientras las campanas no dejan de repicar. Al fondo de la iglesia, Shibly, Jack y Shadi, los tres kawas en uniforme azul y oro, esperan para regresar a Jerusalén. Han guiado el cortejo durante toda la jornada, abriendo la marcha a los franciscanos y al patriarca. Shibly sonríe: «Es verdad que lo hago todos los años, pero eso no importa y siempre es una gran alegría celebrar la Navidad en Belén».

Los frailes siguen trabajando, organizando y preparando la iglesia para las misas del día siguiente. En la gruta de la Natividad, los peregrinos desfilan hasta la mañana siguiente, mientras en el altar del Pesebre se celebran misas durante toda la noche. Hay muchos indios; Salma, por ejemplo, trabaja en Jerusalén. A las 5 se celebrará una misa en su lengua. La comunidad india de Israel ha venido hasta aquí y está contenta.

Hay mucha calma, pero todavía no ha terminado todo. Con el nacimiento de Cristo, se nos ofrece un nuevo comienzo.

Hélène Morlet

sábado, 12 de diciembre de 2015

Navidad en Belén sin luces ni música

La municipalidad de Belén, en Tierra Santa, decidió reducir las celebraciones de Navidad este año por la violencia que vive la región, donde han muerto más de un centenar de palestinos y una veintena de israelíes en los últimos dos meses en ataques palestinos y enfrentamientos con el Ejército israelí.

A petición de las autoridades de Ramala, la Alcaldía que encabeza Vera Baboun decidió hacer más discretas las ceremonias, confirmaron hoy a Efe fuentes oficiales palestinas.

Este año, se evitarán los conciertos al aire libre y las tradicionales marchas con música de bandas de los boy-scouts, y se cancelará la comida que tradicionalmente sigue al encendido de la iluminación del árbol de Navidad, que tendrá lugar el próximo fin de semana en la Plaza del Pesebre, frente a la Iglesia de la Natividad, construida sobre la gruta en la que nació Jesús, según la tradición cristiana.

También habrá menos decoración pública y se sustituirán los fuegos artificiales que marcaban cada año el inicio de las celebraciones por el repicar unido de todas las campanas de las iglesias de la ciudad el próximo sábado a partir de las 19.30 hora local (17.30 GMT), en un gesto de apoyo a la paz.

Belén ha invitado a iglesias de todo el mundo a unirse a este acto simbólico.

"Considerando el ambiente general que prevalece por el momento en Tierra Santa, la Municipalidad de Belén ha decidido mantener el calendario de eventos, pero con algunos cambios", señaló el Patriarcado Latino de Jerusalén en un comunicado.

"Las principales celebraciones son religiosas y en ese sentido todo se mantendrá igual, especialmente las del día 24. La Navidad es una celebración nacional pero, al mismo tiempo, estamos viviendo una situación especial y tenemos que mostrar compasión con los que mueren cada día, por lo que este año celebraremos más calladamente, como muestra de solidaridad", dijo hoy a Efe el padre Yamal Khader, rector del Seminario del Patriarcado Latino en Belén.

"Es importante encontrar un equilibrio. No vamos a cancelar las celebraciones, pero tampoco podemos decorar las calles como otros años, lo que sería una falta de sensibilidad hacia los demás", añadió el religioso, que recordó que las Navidades son "un signo de esperanza y de una nueva vida, que hace sentirse más cerca de los que sufren".

Por su parte, un representante de la Iglesia Luterana en Belén, señaló a Efe que "entiende la decisión", y explicó que "habrá menos música en público", algo que no tiene excesiva importancia porque "la Navidad es sobre todo una celebración del nacimiento de Jesús y un mensaje de paz

sábado, 5 de diciembre de 2015

Visita a Saxum del Custode de Tierra Santa

 _MG_4029 copy Este miércoles, 11 de noviembre, tuvimos el honor de recibir al Custode de Tierra Santa, P. Pierbattista Pizzaballa. Aunque fue una visita breve, el Custode pudo ver tanto el exterior como el interior de lo que se ha construido hasta ahora.

El Custode o Custodio, es designado por el Papa y, junto la orden Franciscana, tienen la labor de “animación de la liturgia, recepción de los peregrinos, asistencia en el sostenimiento de las estructuras de los lugares santos, y otras actividades ecuménicas”.

Llegó acompañado por el Vicario del Opus Dei en Jerusalén, d. Joaquín Paniello. Primero estuvo visitando con el la construcción desde fuera. 

Posteriormente, ya en compañía de los encargados del proyecto, entraron en las distintas salas todavía en construcción. También visitaron la habitación modelo de Saxum. Fueron subiendo a través de las escaleras interiores a los distintos niveles del edificio, y salieron por la parte de arriba, desde lo que será el Centro Multimedia.

Al finalizar la visita, concedió una breve entrevista para Saxum Fundation hablando del proyecto, y del interés del mismo para Tierra Santa.