sábado, 25 de abril de 2009

Playa del Primado de Pedro

Quedan poco más de dos semanas para la visita del Santo Padre a Tierra Santa. Preparando este próximo gran evento hablaré de la playa del Primado de Pedro. En estos días de Pascua hemos leído el Evangelio que tiene lugar aquí, cuando los discípulos volvían de intentar pescar y el Señor les esperaba en la orilla. Se produjo el milagro de la pesca milagrosa, y al llegar se encontraron que Jesús les había preparado el desayuno. Al rezar en esta playita nos imaginamos perfectamente, a unos 100 metros, la barca con los discípulos remando hacia la orilla. Pedro se lanza al lago dándose cuenta que ese hombre es el Señor. También resulta muy fácil aquí revivir la escena del paseo que se dan Jesús y Pedro por la playa, cuando el Señor le pregunta si le ama, y después le entrega el Primado. Es uno de los nombres que se le ha dado a la iglesia que hay en este lugar: iglesia del Primado. Aquí le dijo Jesús a Pedro "Apacienta mis ovejas, apacienta mis corderos". También se la ha llamado "iglesia de los Doce Tronos", por aquellas palabras de Cristo: "Y os sentaréis en doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel". Por último se la ha denominado alguna veces como "iglesia de los Carbones", que alude a las brasas que se mencionan en el Evangelio de san Juan, donde se dice que Jesús les tenía preparado un pez asado. Por eso es interesante fijarse -dentro de la Capilla- en la roca sobre la que está el altar, donde estarían las brasas y los peces. En esta roca grande que allí vemos les esperaría el Señor con las brasas. La orilla se encuentra hoy algo separada del lugar, como a unos 50 metros. Por eso se llama a esta roca "Mensa Domini", "la Mesa del Señor", aunque también este elemento puede simbolizar a la "roca" que es Pedro. Fuera de la Capilla, en pared lateral que da al mar, también es interesante fijarse en los escalones excavados en la roca -hoy muy gastados y protegidos por una pequeña verja- sobre los que estuvo el Señor, según nos transmite la peregrina Egeria. Esta famosa peregrina española -provenía de Galicia- que visitó los lugares Santos alrededor del año 381, explica que “cerca del lugar de la multiplicación de los panes y los peces hay unos escalones donde el Señor estuvo”. Hay en esta roca muchas inscripciones antiguas que señalan el lugar como muy importante para el cristianismo. Egeria no menciona que aquí hubiera ninguna iglesia, pero sabemos que en este lugar fue construida una a fines del siglo IV. Tenía aproximadamente las mismas dimensiones de la iglesia que encontramos actualmente. En el siglo IX, año 808, aparecen por primera vez referencias a esta iglesia como el lugar de los Carbones. La iglesia sobrevivió más que cualquier otra de la zona. Finalmente fue destruida en el 1263. La actual iglesita franciscana fue construida en 1933.
En la playa, a un lado de la roca, hay unas piedras planas que se pueden pisar. Muchas veces la gente no se fija, pero son unas rocas que sobresalen un poco de la arena y que tienen forma de corazones. Son muy antiguas, y recuerdan esas tres preguntas del Señor a Pedro, a las que finalmente Pedro responde con fe y humildad: "Señor, tu lo sabes todo, tu sabes que te amo".
Para mi gusto este es uno de los lugares más agradables para visitar de los que estuvo el Señor. Se te queda muy grabado en la cabeza y en el corazón. Siempre que puedo vuelvo para rezar un rato en este lugar Santo. Y, en estos días, si consigo ir, pediré de forma especial por los frutos del viaje del Papa a Tierra Santa.

2 comentarios:

Luz Quemada dijo...

Estar en esos lugares en los que sabemos que estuvo Jesús me encantó cuando estuve en Tierra Santa, ves ese sitio con otros ojos y parece que te sientes mas cerca de Él, que suerte los que vivis allí poder frecuentarlos, no me extraña que vayais allí a rezar, es un lujo que teneis unos pocos..
Hace poco estuve en el monte sinai y me pasó lo mismo, me impresionó pensar que allí pasaron tantas cosas del antiguo y nuevo testamento, entre DIos y los hombres, parece aquello como si fuera el centro del mundo, es una sensacion increible subirlo (se tardan entre 2 y 3 horas andando) y poder sentarte en la cima a meditar y rezar viendo todo aquello. Gracias Santi por acercarnos a esa tierra de Jesus.

Anónimo dijo...

Hola padre.
Acabo de descubrir su blog a través de buigle.
Con su permiso y citando la fuente, reproduciré su experiencia en la Eucaristía de Belén.
He llegado a esta entrada sobre el primado de Pedro y se me caen las lágrimas de emoción porqeu este verano tuve el inmenso regalo de poder estar allí y fué con mucho el lugar que más me conmovió.
Le pido que cuando vuelva a orar allí, nos recuerde a mi y a mi familia y nos presente al Señor.
El blog que hago para mi parroquia es éste: http://estaesnuestracasa.blogspot.com
Un abrazo en el Señor.
Balbi.